Fibras Naturales Canarias (FNC). Valorización de residuos plataneros

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Ponente

Otro personal investigador

Mario D. Monzón Verona – Profesor Titular de Universidad

Grupo de Investigación de Fabricación Integrada y Avanzada – ULPGC

La importancia del cultivo del plátano en las Islas Canarias es evidente, teniendo en cuenta que el área de cultivo es de alrededor de 9.000 hectáreas, produciendo casi 400.000 toneladas al año. Sin embargo, la producción de plátanos tiene una característica especial, pues se trata de uno de los cultivos que más residuos genera, ya que, una vez se recolecta el fruto de la planta, el pseudotallo se corta y permanece en la plantación como residuo, pues carece de valor agrícola y/o comercial. Debido a esta peculiar característica, se produce un grave problema de gestión de residuos, y muchos agricultores se ven obligados a acudir a empresas que quemen los restos para poder continuar produciendo.

Como alternativa a esta situación, la solución que aquí se presenta permite el aprovechamiento de estos residuos generados, concretamente del pseudotallo de la planta o rolo, a partir del cual, mediante un proceso mecánico en la planta de extracción, se puede obtener las siguientes materias primas:

Fibra larga: Puede utilizarse como materia prima para hilo continuo, tejido técnico, material compuesto a partir de tejido técnico o pasta de celulosa para diferentes usos (papeles especiales, filtros, papel moneda, nanocelulosa para usos médicos, etc.).
Fibra cortada: Puede ser requerida para refuerzo de materiales compuestos.
Pulpa residual: Algunos de sus usos son como aditivo para piensos (de acuicultura u otros), material para elaboración de paneles con propiedades de aislamiento térmico y acústico en la construcción, o sustratos para viveros y procesos de reforestación.
Líquido o savia: Puede servir como base para fertilizantes en diferentes cultivos, aditivo de productos ignifugantes para tejidos o piezas plásticas, entre otras aplicaciones.

Esta solución, totalmente desarrollada gracias al proyecto BAQUA (www.lifebaqua.eu), cofinanciado por el Programa LIFE, la conforman la maquinaria necesaria para la extracción de los compuestos, actualmente a escala piloto, y el proceso productivo de extracción del residuo del cultivo del plátano. Dicha maquinaria está protegida mediante patente (P201330611).

Tipo de resultado de I+D

Grado de madurez comercial

Grado de protección

Ámbitos de aplicación comercial

Cooperativas de agricultores productores de plátano.
Productores de fibras naturales.
Productores de materia prima de materiales plásticos de base bio.
Productores de materia prima de materiales plásticos reforzados.
Productores de piensos para la acuicultura.
Productores de abonos y compost.
Sector de la automoción (componentes de vehículos).
Sector textil, calzado, marroquinería, mobiliario.
Sector de la construcción (materiales aislantes, paneles, tuberías…).

Oportunidad de mercado

En el ámbito local, solamente en las Islas Canarias, cerca de 9.100 hectáreas se encuentran destinadas al cultivo de plátano, lo que genera más de 240.000 toneladas anuales de residuos vegetales que acaban en vertederos o en las propias plantaciones, suponiendo un problema de acumulación de residuos para la siguiente cosecha. A partir de estos restos, podrían extraerse 2.000 toneladas de fibra y 20.000 toneladas de pulpa al año, proporcionando una cantidad importante de materias primas provenientes de fuentes ecológicas y altamente disponibles.

A escala global, se puede destacar que, actualmente, las fibras de platanera son recurridas en diversos sectores, por ejemplo, en Sudamérica se obtiene fibra del banano de manera artesanal (manual) y se utiliza para hacer bolsos, mobiliarios o papel. Todo ello se vende como artesanal y, por lo tanto, los mismos que obtienen la fibra la utilizan para hacer un producto artesanal, pero en ningún caso a gran escala. Otro caso es el de Suiza, donde existe una empresa de textiles que realiza prendas solo con fibra de platanera, al igual que en Indonesia, donde hacen carteras con las mismas. Así, se puede ver que existe un potencial mercado no solo europeo, sino también asiático y americano, al no existir empresas que utilicen el proceso industrial que aquí se presenta.

Además, es importante tener en cuenta las predicciones, según las cuales se espera que en 2025 el sector de las fibras «eco» esté en torno a 93.000 millones de euros, creciendo a un ritmo del 12,1% anual en estos próximos 4 años.

Ventaja competitiva

La principal ventaja que presenta esta solución es que la mayor parte de las instalaciones y equipos empleados son de nuevo diseño y no existen a nivel comercial en el mercado. Justamente, este proceso industrial automatizado está protegido mediante patente, así como todo el conocimiento obtenido en la investigación del proyecto Life Baqua en el que se ha realizado las pruebas de validación con diferentes mercados y empresas.

Además, esta solución cuenta con un recurso crucial, y es que el propio residuo que se utiliza para obtener nueva materia prima se encuentra en el lugar de origen, por lo que no hay necesidad de importar producto, favoreciendo, como se ha comentado en otros apartados, el establecimiento de una economía circular.

Asimismo, es importante destacar que, actualmente, la reducción de materiales sintéticos es un objetivo global y, por tanto, también lo es encontrar nuevos productos que puedan sustituirlos. Por un lado, la fibra natural de la platanera, frente a otras fibras sintéticas como las de vidrio o carbono, presenta mejores propiedades:

Estructurales: menor densidad y mayor estabilidad dimensional y resistencia.
Acústicas: mejor capacidad de aislamiento.
Estéticas: color similar a madera que enfatiza la condición de producto ecológico.
De inflamabilidad: más capacidad de autoextinción.
De biodegradabilidad: más capacidad de descomposición por agentes biológicos.

Los materiales con fibra de platanera, si bien presentan mayor variabilidad en sus propiedades mecánicas que los plásticos compuestos reforzados con fibras sintéticas, compiten con ellos al ser más sostenibles. También se puede usar la fibra de platanera para producir otros materiales 100% biodegradables como pasta de celulosa, hilo continuo y tejido técnico.

Además, cabe señalar que la fibra natural de la platanera se obtiene a partir del residuo de un cultivo cuyo fin principal es producir un fruto, con lo cual no se dedica terreno extra, agua, abonos, etc., exclusivamente para producir dicha fibra, tal como ocurre con otros cultivos como el lino, algodón y otros, que sí requieren de un terrero específico para su extracción.

Por otro lado, la pulpa residual tras la extracción de la fibra, posee un alto contenido en antioxidantes y otras materias primas novedosas útiles como complemento en la elaboración de piensos para peces, presentando las siguientes ventajas:

Los compuestos antioxidantes naturales son una alternativa bio frente a los antioxidantes sintéticos que se utilizan en la actualidad.
La pulpa podría sustituir la harina de maíz en las dietas de algunas especies de peces, con lo que la alimentación de estos animales no competiría con la humana.

Todo lo anterior redunda no solo en una mejora de los piensos sino también en la salud y la calidad del producto final para el consumidor.

Recursos necesarios para su implementación

Inversión para llevar a cabo la industrialización de la planta de extracción de fibra y pulpa.
Acuerdo con agricultores para la obtención de rolos.